martes, 3 de febrero de 2009

En la Biblia, se encuentran muchos paralelos (es decir, características morales idénticas entre dos personajes). Una semejanza la encontramos entre Moisés y Cristo. Veamos las similitudes entre ambos personajes.

Moisés fue salvado en su niñez de la muerte ordenada por Faraón, en contra de todo varón hebreo recién nacido (Éxodo 1:15-17) y durante su juventud renunció a la corte real para identificarse con su pueblo; así también sucedió con Jesús, quien fue rescatado en su infancia del infanticidio decretado por Herodes (Mateo 2:13-14) y renunció a toda su gloria para identificarse con su pueblo. Además, los dos llegaron a ser grandes libertadores.

Moisés y Jesús fueron hombres humildes (Números 12:3, Mateo 11:29). De sus corazones fluía compasión y amor (Números 27: 16-17, Mateo 9: 36). Se destacaron como intercesores poderosos (Deuteronomio 9:18, Hebreos 7:25). Hablaban con Dios cara a cara, pues mantenían íntima comunión con el Padre Celestial (Éxodo 34: 10, Juan 1:18). Reflejaban la gloria del Todopoderoso (Éxodo 34: 29-30, 2ª Corintios 4:4). Obraron grandes milagros (Éxodo 14: 21-22, Mateo 15: 34-38).

Por. Hno. Atilio Cerón .
Pastor del Distrito 1 del Ministerio Cristiano Canaan